Lanzar una campaña de email marketing efectiva implica prestar atención a múltiples detalles: desde la redacción del contenido y la elección de la plantilla hasta la selección de los destinatarios y la personalización del mensaje. Cada paso tiene su importancia, y en cualquiera de ellos se pueden cometer errores que echen por tierra el esfuerzo del equipo.
Para evitar estos fallos, te damos algunas claves sobre los aspectos más críticos donde suelen ocurrir errores comunes, como el asunto, las imágenes y el contenido. Además, te ofrecemos consejos para minimizar el impacto de cualquier error, protegiendo la reputación de la empresa.
Tres Claves para Minimizar Errores en una Campaña de Email Marketing
Cada campaña es única, pero la mayoría de errores se pueden prevenir si prestamos atención a estas tres claves:
1. Revisión Detallada del Contenido
El contenido es el corazón de tu campaña y uno de los principales focos de error. Algunos puntos a revisar especialmente son:
- Texto: Una vez enviado, los errores en el texto no se pueden corregir. Revisa no solo la ortografía, sino también palabras clave como precios, fechas, condiciones y cualquier información esencial para la campaña. Leer el contenido en un formato distinto (otra tipografía o tamaño) puede ayudarte a detectar errores que antes pasaron desapercibidos.
- Enlaces: Si tu campaña incluye varios enlaces, usa un verificador automático para asegurarte de que están correctos. Además, si enlazas a páginas de tu web, verifica que estas están actualizadas y que el contenido es relevante y preciso para la campaña.
- Imágenes: En campañas visuales, las imágenes juegan un papel crucial. Asegúrate de que tienen el tamaño y formato adecuados para cada tipo de dispositivo y perfil de usuario.
2. Previsualización Completa del Diseño
La plantilla de tu email es otro elemento donde suelen surgir errores. Muchos problemas pueden prevenirse con una previsualización adecuada. No basta con una revisión rápida; dedica tiempo a verificar cada aspecto del diseño:
- Revisión en múltiples dispositivos: Un diseño que se ve bien en tu ordenador podría recortarse o distorsionarse en dispositivos móviles o en algunos gestores de correo. También es útil ver cómo se muestra sin imágenes, ya que muchos usuarios no las tienen habilitadas por defecto.
- Accesibilidad: Al modificar o duplicar plantillas para cada campaña, pueden aparecer errores de accesibilidad, como baja legibilidad por contraste inadecuado, tipografías pequeñas o falta de textos alternativos en las imágenes. Asegúrate de que la plantilla sea accesible para todos los usuarios.
3. Pruebas y Testeo
El testeo es fundamental en cualquier campaña de marketing. Enviar pruebas internas permite detectar errores antes del envío general. Aquí te decimos qué revisar en estos tests:
- Asunto, preencabezado y remitente: Estos elementos son lo primero que ven los destinatarios y afectan directamente a la tasa de apertura. Revisa que estén bien redactados y libres de errores, ya que pueden afectar la percepción y, en algunos casos, hacer que el correo caiga en la carpeta de spam.
- Destinatarios y personalización: Un error en la segmentación de destinatarios puede perjudicar la campaña y dañar la relación con los suscriptores. Personaliza adecuadamente y asegura que los datos del destinatario se visualizan correctamente en la prueba.
Revisar el diseño y las llamadas a la acción en distintas plataformas de correo te permitirá ajustar la campaña para optimizar la experiencia del usuario y mejorar los resultados.
¿Cometiste un Error? Tres Soluciones para Resolverlo
Incluso después de seguir estos pasos, es posible que el error se descubra justo tras enviar la campaña. Aquí te mostramos qué hacer según la gravedad del fallo.
1. Soluciona Rápidamente lo que Puedas
Aunque no se puede “desenviar” un email, algunos errores pueden solucionarse. Por ejemplo, puedes actualizar el contenido en las páginas a las que dirigen los enlaces, corregir imágenes si se descargan desde el servidor o actualizar la versión web de la campaña para que refleje la información correcta.
2. No Hacer Nada si el Error es Menor
A veces, el mejor curso de acción es no hacer nada. Un error menor, como una pequeña errata, no suele afectar gravemente la compresión del mensaje y una nueva campaña podría resultar innecesaria. Tomar nota del error para no repetirlo suele ser suficiente en estos casos.
3. Enviar una Rectificación si el Error es Grave
Si el error afecta a aspectos críticos como precios, fechas de promociones o condiciones de compra, es necesario enviar una rectificación. En este caso, es importante usar un tono adecuado en el mensaje de disculpa.
- Tono de disculpa: Puedes optar por una nota informal y amigable si el error es menor, o una carta formal si el fallo es más serio, detallando las medidas que se están tomando para solucionarlo.
- Asunto del email de corrección: Agregar términos como “ACTUALIZACIÓN” o “CORRECCIÓN” ayuda a captar la atención del destinatario y a diferenciarlo del email original.
Revisión de Resultados para Aprender de los Errores
Después de aplicar una solución, monitorea cómo afecta el error y su corrección en las estadísticas de la campaña. Analizar las tasas de apertura, clics y bajas de suscriptores te ayudará a aprender y mejorar en futuros envíos.
Siguiendo estos pasos, podrás minimizar errores, proteger la reputación de tu marca y asegurar que tus campañas de email marketing tengan un impacto positivo en tu audiencia.
